sábado, 15 de marzo de 2014

Lo Encontrado

Lo Encontrado



Hans con sus  25 años era un jóven muy normal, tenía su novia Therese, decendiente de franceses, y muy buena y comprensiva con Hans., lo cual era mutuo y estaban por cumplir un año de novios. Therese era muy querida por Abraham y por Ruth, los padres de Hans . El padre y la madre de ella, o sea Andrea y Ethel , eran católicos practicantes, lo mismo que la familia de Hans, por ello hicieron muy buenas migas y empezaron a salir a cenar y se invitaban una vez en casa de los padres de Hans y la próxima en casa de Therese. La familia de ella estaba afincada en Hamburgo desde hacía diez años y el era dueño de una Concesionaria de Autos Mercedes Benz; mientras Abraham, con su parte de herencia del Astillero y comprándoles a sus hermanos Friederich y Brenda sus partes en el Astillero, y quedó como único dueño. Así que ambos matrimonios tenían muy buen pasar; a la mitad del año, decidieron alquilar bungalows en las Islas del Pacífico específicamente Bora Bora. Hans se quedaba solo, mientras Therese, se quedaba con su hermana Prisca dos años más chica que ella que tenía 23 años .Hans  y Therese a pesar de su edad y de ser el año 2010, no mantenían relaciones sexuales, los dos se habían prometido llegar vírgenes al matrimonio, o sea actuar como Dios manda y no siguiendo la moda de juntarse de todos sus amigos y conocidos. Hans que también trabajaba en el Astillero en un puesto jerárquico, las invitó a las dos a Escopell a Cenar y luego a Strauss a tomar un café. La pasaron muy bien y Hans como caballero que era, las llevó a las dos a su casa en su Mercedes, le abrió la puerta para subir y para bajar, y antes de que ellas entraran en la casa se aseguró de que todo estuviera bien dentro de ella y dejó las alarmas conectadas. Al dejarlas les dijo
-         Hasta mañana, a las cinco salgo de trabajar y las paso a buscar para que vayamos al Zoo¿Qué les parece?, nos encanta, contestaron Therese y Prisca.
-         Bueno hasta mañana mis queridas amigas y para vos There, mi más que amiga y la despidió con un beso rozando los labios con los suyos, y le dio un beso en la mejilla a Prisca.
-         Mañana voy con un amigo mío de Argentina Luis, es divertidísimo la vamos pasar fantástico.
-         Genial Prisca, lo tenías escondidito, nunca lo habías nombrado
-         Es que es un compañero de las clases de pintura
-         Ah, cierto que estudiabas en la Escuela de Bellas Artes
-         Si y allí tengo muchos amigas y amigos.
-         Me alegro mucho por ti, bueno se está haciendo tarde así que me despido, chau, chau.
-         Hasta mañana Hans, dijeron las dos.´
-         Hasta mañana chicas.







Mientras Hans iba manejando a su casa, pensaba y daba gracias a Dios por tener de novia una chica tan buena y decente y principalmente por la educación Católica de sus padres Abraham y Ruth. Estaba dando gracias cuando de repente un peatón salió corriendo hacia la calle y Hans trató de esquivarlo y le pegó en una pierna, con el auto ya frenado, no le hizo nada solo un golpe, el hombre dijo
-         ¡Hijo de puta, casi me matás!
-         Pero no fue culpa mía señor, usted salió corriendo al pavimento y me agarró de sorpresa, Gracias a Dios que lo esquivé, sino usted no contaba la historia
-         ¡Me las vas a pagar! Y haciendo el símbolo del diablo, la mano con los cuernitos, se levantó y se fue.
Hans se quedó temblando del susto, y se dijo “Desgracia con suerte”, Gracias Señor que no lo maté, podría haber sido mucho peor. Llegó a su casa y entró el auto y por la puerta que conectaba el garage con su casa, entró al baño y se dio una ducha, porque se sentía manchado, se enjabonó bien y se paso un cepillo por todo el cuerpo, luego se enjuagó y después de secarse, se acostó. NO podía dormir pensando en ¡Me la vas a pagar! Y el símbolo satánico que le hizo el hombre y también pensando en la cara desencajada del tipo y sus ojos como fuego. No pudo pegar un ojo, a las 5 de la mañana se puso a ver un DVD, era “El escritor fantasma” con Pierce Brosnan, cuando se hicieron las 7 se preparó un café cargado, y se puso a leer la Biblia, como acostumbraba todas las mañanas, estaba empezando a leer los Salmos, se leyó los primeros tres con sus explicaciones y le bajó un sueño que lo hizo dormir una hora. Al despertarse a las 8.30, fue a correr un poco , hasta la plaza que le quedaba a doce cuadras y el corría de ida y volvía caminando a paso vivo. Ya al ser las diez y treinta la llamó a Therese y le contó lo que le había pasado.
-         ¿Te hiciste algo?`preguntó ella
-         NO, no me hice nada y el hombre estaba bien, se fue caminando, a pesar del golpe en la pierna, pero fue muy leve el auto estaba frenado
-         Entonces no te preocupes cariño, y duerme una buena siesta.
-         Es que no puedo sacarme la cara de ese tipo de la cabeza y el símbolo demoníaco me dio mucho miedo.
-         Tranquilízate , yo me pongo a rezar un Rosario por vos así te tranquilizas , y mejor porque no lo rezamos juntos, ¿No quieres venir a casa y siendo dos Jesús está en medio de nosotros?
-         Okay, ya voy para allá, en diez minutos estoy, beso mi amor.
-         Otro para vos, te espero.




Al finalizar la oración Hans le dijo a Therese, me siento mucho mejor, gracias por tu invitación.
-         De nada mi amor es lo menos que puedo hacer por ti.
-         Bueno vamos al Zoo, que les parece.
-         Me encantaría dijo Prisca, pero primero pasemos a buscar a Luis, el argentino, que es graciosísimo, es de una ciudad llamada Córdoba, y tiene un gran sentido del humor, ya lo conocerán.
-         Pero querido tu tienes que descansar , no has dormido nada, dijo Therese
-         No gracias, tengo ganas de airearme los pulmones, vamos al Zoo, que la pasaremos bien.
-         Bueno, como vos digas, vamos todos al Zoo.
Pasaron a buscarlo a Luis, era petiso con una larga melena negra, su aspecto era muy simpático. Apenas subió al auto empezó a hablar macanas y los divirtió a todos, cuando bajaron al Zoológico, casi se tropieza por ver una chica que estaba mortal y todos se rieron.
Todos la pasaron muy bien viendo a los animales de todas clases, pingüinos, zebras, jirafas, etc,, la verdad es que el Zoo de Hamburgo era uno de los más completos en toda Alemania. Compraron pop-corns y comida para darle a los animales y anduvieron en tren por todo el Zoo.
Al hacerse más tarde para ir a cenar, decidieron partir y todos fueron al auto de Hans y éste vió en el parabrisas de su auto un papel pegado, lo sacó lo abrió y leyó en vos alta, mientras se ponía blanco del susto YA ME LAS PAGARÁS.
-         Este debe ser el tipo que sin querer choqué ayer y le temblaba la mano que sostenía el papel.
-         Puede ser una cargada de alguien que te conoce, dijo Luis
Las chicas estaban mudas del miedo y Therese dijo
-         Vamos yendo, por favor
-         Si nos vayamos ya, dijo Hans
-         Cuéntame lo del tipo que chocaste, dijo Luis
Hans le contó todo y Luis le dijo
-         tenemos que hablar  de hombre a hombre.
-         Si dijo Hans, dejamos las chicas y nos vamos a mi casa,¿Te parece bien Luis?
-         Si, me parece excelente.
Hans, manejó muy prudente como siempre y ayudó a las chicas a bajar.
-         Te veo mañana Therese,¿OK?
-         Si, me quedaré rezando por ti.
-         Gracias mi amor y le dio un piquito.
-         Chau chicas , dijeron Hans y Luis,
-         Hasta mañana chicos.
-         Si ya me queda una semana y se me acaban las vacaciones, justo a mitad de mes y a fin de mes vienen nuestros padres de Bora Bora y Tahítí. Dijo Hans.
-         Vamos a charlar Hans dijo Luis.
-         Si ya mismo vamos para casa.






Al llegar a casa de Hans, éste le preguntó a Luis que quería decirle
-Antes que nada preguntarte cómo fue el accidente, dijo Luis
-Salió intempestivamente hacia la calle, yo frené con toda mis fuerzas y cuando el auto estaba ya casi parado, le rozo una pierna y el me grita y me hace los cuernos, con su mano derecha, eso es todo
- Esos cuernos, pueden ser un símbolo o simplemente un insulto
- Si, pero si el mismo que me dejó el papel en el auto, es un símbolo maléfico.
- Ya lo creo Hans, nos hallamos frente a un caso de un tipo que no se anda con vueltas, tienes que avisar a la policía, para que lo encuentren y lo castiguen por acoso, se trata por lo veo que puede ser un tipo peligroso
- Vaya que si lo es, tengo el papel en mi bolsillo delantero del jeans, me acompañas a la policía.
-Sí como no Hans, si te puedo ayudar en algo.
-Bueno vamos ya.
Al llegar al cuartel de Policía, los atendió un hombre obeso pero muy eficiente. Hans le contó todo y dijo que traía como testigo a un amigo, que era Luis; el Policía le dijo que esperaran que ya los iba a hacer hablar con el Detective de turno, que en 5 minutos venía. A los cinco minutos exactos el detective Mueller se presentó y los atendió, Hans le contó del accidente y le mostró el papel que encontró en su coche. El detective lo guardó como prueba y le preguntó a Hans si quería custodia en su domicilio, éste contestó
-         No,  gracias, tengo alarma conectada con ustedes los de la Central de Policía, asi que si suena, ustedes, ya estarán allá en 3 minutos.
-         Bueno, dijo Mueller, como usted diga, si pasa cualquier otra cosa, hazmelo saber-
-         Por supuesto detective, y le dio la mano y el policía le dio una palmada en el hombro.




Hans y Luis salieron más tranquilos porque habían hablado con la Policía.
-         ¿Y sí pagas un investigador privado?dijo Luis
-         Tenés razón, no lo había pensado, pero yo con mi dinero puedo pagarlo.
-         Entonces que esperas
-         ES que no sé cual será bueno y no tengo a nadie a quién preguntarle y no quiero preocupar a mis padres en sus vacaciones.
-         Yo sé de uno muy bueno, que contrató un amigo mío y era una excelente persona, decente, educado y moderado en cobrar, Se llama Rex Büller, todos le dicen Rex
-         Y dónde lo encontramos
-         A veinte cuadras de aquí, en un moderno edificio de departamentos.
-         ¿Lo encontraremos a esta hora?, dijo Hans
-         Si por supuesto, vamos ya.
-         Ok, vamos para allá.
Y mientras iban para allá Luis no se cansaba de hacer bromas, para sacarle la seriedad a Hans y hacerlo sentir mejor.
Pero éste seguía pensando en el hombre loco ese, y cual sería su próxima jugada, si es que había otra jugada.
Estacionaron en un moderno edificio de departamentos, unos de los más modernos de Hamburgo, con ascensores externos vidriados, para ver el paisaje y tenía como 50 pisos y Rex, estaba en el 48, así que se bajaron del auto, después de haberlo estacionado en una playa moderna y elegante. Tomaron el ascensor y le dijeron al ascensorista, que estaba muy elegantemente vestido con chaleco rojo y botones dorados, al piso 48 por favor y llegaron y le dijeron “buenas tardes” a lo que el ascensorista contestó “igualmente”. Llegaron al departamento de Rex Büller, que en realidad era su oficina, tenía pintado con negro en la puerta de entrada, Rex Büller, Investigador Privado. Luis los presentó, ya que él lo conocía de la casa de su amigo, y Hans comenzó a hablar en forma muy vehemente a lo que Rex dijo
-         Bajemos los deciveles y contame bien que mensajes te dejó.
-         Fueron dos , uno cuando choque, que me hizo el símbolo del diablo y otro que encontré en el parabrisas de mi auto, no lo pude traer porque se lo dejé a la policía.
-         Y, qué decía
-         Ya me las pagarás, lo mismo que me dijo cuando estaba tirado en la calle.
-         Está bien que hayas ido a la policía, a veces la policía pide mi colaboración para ciertos casos”insolubles”. YO cobro 100 Euros la hora. ¿Estás de acuerdo?
-         Aquí le pago diez horas por adelantado Rex
-         Antes dame tu número de teléfono y tu dirección y número del teléfono fijo y en menos de tres días tendrás un informe preliminar mío.
-         Gracias Rex por ayudarme
-         Tu te estás ayudando a ti mismo.
-         Lo mismo, muchas gracias. Dijo Hans
-         Ah y no te olvides de contarme todo lo que te pase de aquí en más, es fundamental para la investigación.
-         Ok, lo haré dijo Hans, y le estrechó la mano. Lo mismo hizo Luis, que también le agradeció mucho.



Bajaron del ascensor, subieron al auto y Hans dijo
-         Asunto controlado, así me gusta a mí cuando está todo bajo control.
-         Si gracias a Dios, dijo Luis.
Llegaron a la casa de Luis y éste lo despidió con un abrazo y por supuesto Hans hizo lo mismo.
-         Lo que necesites, llámame, dijo Luis
-         Por supuesto mi nuevo amigo, lo haré sin dudar, hasta luego
-         Nos vemos, y se entró corriendo a la casa por que había empezado a llover.
Hans llegó empapado a su casa y en la puerta del garage tenía un papel escrito que decía YA ME LAS PAGARÁS. Hans empezó a temblar quizo romper la hoja, pero dijo “me hará falta para la investigación” y con lluvia y todo, volvió a lo de Rex, estacionó rápidamente, subió en ascensor y llego a la oficina del investigador privado, éste estaba arreglando unos papeles, cuando Hans entró casi corriendo y le mostró diciéndole,
-         Mira Rex, lo acabo de encontrar en la puerta del garage de mi casa. Me siento muy mal, no se qué hacer, ayúdame Rex,
-         Si por empezar te daré un revolver para que te defiendas, sólo úsalo para defenderte, así lo haces en defensa propia y nadie puede decir nada, asique nada de atacar solo defensa.
-         Gracias, aquí te dejo el papel.
-         Y el papel viene manuscrito, así que se puede sacar lo que la persona es capaz de hacer, se llama Grafología y ha ayudado a resolver muchos crímenes, no la tenías a esta o sí.
-         La verdad es que no tenía ni idea
-         Lo voy a hacer analizar por un grafólogo amigo y después te digo lo que me cuenta, llévate el arma y úsala cómo te dije antes.
-         Si muchas gracias Rex, te llamaré si hay algo nuevo
-         Si porfavor a cualquier hora, estoy disponible las 24, te dí mi tarjeta o no.
-         No dijo Hans,
-         Que picardía aquí la tienes con mi número de este escritorio, con el número de mi casa y con mi celular, llámame cuando gustes.
-         Gracias, hasta luego Rex. Y le tendió la mano
-         De nada amigo y le estrechó fuertemente la mano.
Hans se fue con la mano doliendo y con un arma en su bolsillo de adelante, por suerte él sabía usarla, debido a que desde chico, Abraham su padre, le había enseñado a tirar. Así que con el revólver cargado no tenía miedo de ningún tipo.





Al otro día Hans se despertó por las llamadas del teléfono eran las nueve y media, y el dormía con el revólver bajo la almohada, el teléfono lo sobresaltó, así que instintivamente metío la mano bajo su almohada, después se dio cuenta y atendió era Rex
-         Hola Hans,
-         Hola Rex, discúlpame estaba durmiendo
-         No, discúlpame tú a mí, te quería contar que ya tengo el informe grafológico
-         Ah, cuéntame que dice, por favor.
-         Te lo leo, dice que se trata de una personalidad obsesiva, agresiva y con algunas carácterísticas sociopáticas .
-         ¿Me lo puedes traducir?
-         Si , que lisa y llanamente es un loco, capaz de hacer cualquier cosa por nada, como fue el accidente contigo.
-         Ay, mi Dios y cómo me defiendo bien de un loco como ese, ya tengo tu revolver, pero me parece poco, voy a contratarme una guardia de dos hombres bien armados y leales.
-         Yo te los consigo Hans, esta tarde van a ir a tu casa así que estate allí y no te muevas, ¿tienes alarma?
-         Si, conectada con la policía
-         Pon la alarma ya mismo.
-         Si, está conectada, cuando duermo siempre la conecto.
-         Muy bien ahora tenéla conectada todo el día.
-         Ok, eso haré.
-         Ah, y no salgas de tu casa hasta que tengas los guardaespaldas.
-         Bueno, muchas gracias Rex
-         De nada, tú te lo mereces. Adiós amigo
-         Chau Rex, y colgó.
-         Alli nomás llamó a Therese, y lo atendió Prisca.
-         Hola Si,¿ quien habla?
-         Soy yo Hans, hola Prisca cómo estás,
-         Muy bien gracias , aquí charlando con Luis y tú
-         Bien, va mas o menos, me puedes pasar con Therese
-         Si como nó, Luis te manda saludos,
-         Mandale un abrazo de mi parte, gracias.
Y Prisca llamó , therese, Therese, es Hans.
- Ya voy, ya voy. Hola Hans,¿ como estás?
- No muy bien, te hablo para pedirte oración, porque el tipo que me persigue es un loco de remate, ora por favor para que no me haga nada. Mientras sintió cómo si le quisieran abrir la puerta de entrada.
- Disculpame Therese, pero siento ruidos en el Living. Voy a ver qué es. Mas tarde te llamo, luego sintió ruidos en la ventana de arriba, la de la pieza de los padres, subió con el revólver y luego sintió ruidos debajo de nuevo, bajo corriendo las escaleras y sintió ruido arriba en su habitación, lo estaban volviendo loco, Eran cuatro personas las que estaban haciendo los ruidos o sea que eran de una secta diabólica “pienso que debe ser una secta” Y llamó a la Policía, pero a los cinco minutos, que fue cuando llegó la policía, ya no había nadie. Hans le contó todo a la policía y también les contó de sus guardaespaldas, y por supuesto estaba el Detective Mueller, te mandó algún otro mensaje, Si, dijo Hans y decía lo mismo que la que le dejé a Usted.
- Y dónde está, dijo Mueller
- La tiré , contestó Hans(para no contarle del detective privado que contrató)
- Pero como la tiraste, si yo te dije bien claro, que me las des a mí, para poder investigar bien el caso.
- No me dí cuenta Detective, discúlpeme no volverá a pasar
- Así espero. Todo bien ahora
- Si, todo bien, ya se fue esa gente loca que estaba golpeando en todas partes de la casa.
- Me enteré que vas a costearte tres guardaespaldas
- Si por supuesto, no puedo vivir más así.
- Me parece bien, cualquier cosa nueva, házmela saber.
- Sí, como no Detective Mueller
Y este partió junto con todos los policías que habían ido a la casa. Allí nomás lo llamo a Rex y le contó todo.
- Son gente loca
- Si deben ser de una secta o algo así
- Si, a mí me parece lo mismo. En una hora te mando los guardaespaldas, los puedes esperar,¿No?
- Si por supuesto, espero que los locos no vuelvan antes de la hora
- No ya cumplieron su cometido, asustarte, hoy no van a ir más.
- Gracias Rex, un abrazo
- Igualmente, chau.
Luego de todo el lío, Hans llama a Therese,
-         ¿Qué pasó?, preguntó ella.
Y Hans le comentó todo desde el desgraciado encuentro de la nota en su garage. Como de su revolver y los guardaespaldas, no sin eso comentarle, que eran varios los locos y no uno sólo que pueden ser de una secta rara en Alemania. Ella se puso a llorar, es demasiado para nosotros solos, tendríamos que hablar a nuestro padres en Hawai, dijo Therese,
- No amor, no podemos molestar a nuestros padres que están disfrutando de sus merecidas vacaciones,
- NO, pero SI, esto ya se salió de control, por lo menos del mío, aunque tú tengas todo bajo control, yo no
- Pero mi amor tengo tres guardaespaldas que ya vienen y se van a quedar las 24 horas conmigo, se van turnando, por eso pueden realizar su trabajo
- Si, está bien, pero como sabés que uno de tus guardaespaldas no es uno de ellos.
- Estos hombres son profesionales y me los consigue Rex mi detective privado, por favor amor no sigamos fantaseando, ya encontrarán a estos tipos y los meterán en la cárcel, rezemos un Padre Nuestro y tres Ave Marías, para que todo salga bien y cuando todo termine hagamos como promesa de ir a visitar el Santuario de Shönstat y la Visitamos a la Mamita Virgen y por supuesto al Santísimo.
- Bueno,¿ vos vas a estar seguro?, dijo ella
- Si, por supuesto, escuchas el timbre
-Si, dijo ella,
- Esos son mis muchachos.
. Anda a atender, te espero,
-         No mejor cortemos y hablo en media hora, así les explico las comodidades de la casa, les muestro sus dormitorios, etc. etc.
-         Ok, es pero tu llamado en media hora, beso, chau, cuidate mi amor
-         Si, dijo Hans, me cuidaré, chau.
-         Chau , que Dios te proteja
-         Gracias Therese.




Se fijó por la mirilla de la puerta y no vió a nadie, entonces fue a buscar su revólver, antes de preguntar ¡Quién es! Y no contestó nadie, volvió Hans a preguntar ¡Quién es! Y escuchó una voz que dijo soy yo Luis, pero parecía que estaba drogado o algo así, entonces para ayudarlo abrió la puerta, con el arma en la mano, en ese momento se le abalanzó un viejo con un cuchillo, a clavárselo justo al corazón o a la carótida , Hans lo esquivó y le tiró un tiro que le dio en el riñon, al verlo tirado y ensangrentado, se dio cuenta de que era el viejo que se llevó por delante, entonces dónde estaban los otros, escuchaba gritos que venían de afuera como de guerra, entonces de un salto llegó a la puerta y la cerró, y conectó la alarma que había desconectado cuando vinieron los policías. La gente loca quería tirar la puerta abajo, cosa que hizo sonar la alarma y a los tres minutos estuvieron los policías de nuevo en su casa y lograron agarrar a cinco de los diez hombres, que estaban golpeando la puerta, después el Inspector Mueller llegó y entró a la casa y vió al viejo que se iba en sangre, y preguntó a Hans ¿Tenías un revólver y no me dijiste nada?
-         No, contestó Hans, porque es de mi padre y el me lo prestó para mi seguridad (Dios mió perdoname por mentir)
-         Y el te quiso cortar la carótida
-         Si por supuesto,¡ o cree que le miento!
-         No, no querido, no me mientes, sólo quería interiorizarme del sitio del crímen,
-         Crímen, que crimen el no murió todavía o si
-         El viejo esta mas frío que un frigorífico, es un fiambre,
-         Oh, no Mi Dios maté una persona, ¡Perdóname! Y se puso a llorar debido a todo lo que venía soportando, a la presión que había venido haciéndole frente, y como corolario una muerte, era demasiado para Hans.
-         Pero continuó el detective, hay buenas noticias, la secta a sido encontrada y todos están presos , era una secta diabólica, que no iba a parar hasta matarte, pero ahora no tienes a qué temer, aquí llegan tus guardaespaldas.
Entraron en la casa y se presentaron, cuando lo vieron a Hans llorando uno de ellos le tocó el hombro y le dijo, ya estamos aquí para protejerlo.

- Váyanse, ya no los necesito al único que puede librar mi vida del malvado a ese necesito a Dios mi Creador, que me ha venido ayudando a lo largo de toda mi vida.

Señor, Dios mío en Ti me refugio
Sálvame de todos los que me persiguen
Líbrame para que nadie pueda atraparme
Cómo un león, que destroza sin remedio

Dios es un Juez Justo
Y puede irritarse en cualquier momento
Si no se convierten afilara su espada,
Tenderá su arco y apuntará;
Preparará sus armas mortíferas,
Dispondrá sus flechas incendiarias

Daré gracias al Señor  por su justicia
Y cantaré al nombre del Señor Altísimo

(Salmo 7, versículos 2-3,12-14 y 18)




Fin.



Adrián Prunotto

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